martes, 18 de marzo de 2014

Análisis: Dallas Buyers Club






Puntuación: 8

Lo mejor:
Jared Leto. El mamón se come la pantalla y construye un personaje entrañable. Realmente espectacular.

Lo peor:
Que la historia es real y demasiado habitual en la actualidad.



Sinopsis:
1986. Ron Woodroof es un electricista paleto de texas, fanático de los rodeos, adicto a cualquier sustancia ilegal que se tercie, trapichea con apuestas ilegales y solo tiene una cosa en la cabeza: zumbarse a todas las tías que pueda. Un día se desmalla y en el hospital le dicen que tiene SIDA y que le quedan 30 días de vida. Tras superar la fase de negación, Ron se pone en marcha y hace todo lo posible para recibir medicamentos experimentales que combatan la nueva enfermedad. Pero tras empeorar su salud emprende un viaje a Mejico, donde un peculiar doctor le dice que lo que esta tomando es toxico y le instruye sobre que fármacos debe tomar. A su vuelta a Estados Unidos, Woodrof monta un negocio vendiendo medicamentos no aprobados en Estados Unidos que funcionan mejor que los que promueven las farmacéuticas. Esto a las grandes compañías no les hace ninguna gracia y comienza una lucha de David contra Goliat. Para ello contara con la ayuda de su doctora, Eve, que mira con recelo todo lo que esta pasando en el negocio farmacéutico, y de Rayon, un travesti con sida del que se hace migo.

Opinión:
Antes de empezar diré que he visto seis de las nueve nominadas a mejor película este año y la ganadora es, probablemente, la que menos me ha gustado, lo cual no quiere decir que no me guste. Centrándonos en la cinta que hoy nos toca, me parece la segunda mejor de la tanda de nominadas, a escasa distancia de Gravity, mi favorita.

La historia que puede ser convencional, tiene un plus de emotividad porque denuncia un hecho incomprensible plenamente extendido en nuestros días. La salud, nuestra salud, esta en manos de empresas que quieren que estemos enfermos para vender mas y enriquecerse. Y los gobiernos no solo lo permiten, sino que lo apoyan a cambio de cuantiosos beneficios.


Por ahi ley que lo malo de la peli es que la gente pudiera verla como un telefilm de antena 3, y es cierto que en frio, leyendo la sinopsis, puede parecer un “Basado en echos reales” que pueblan las sobremesas de los fines de semana en las cadenas de nuestro pais. Sin embargo existen numerosos factores que la alejan de estos productos de dudosa calidad.

En primer lugar la dirección. Jean Marc Vallee, director de la magnifica “CRAZY”, realiza una labor encomiable, dotando a la obra de un aspecto oscuro y nauseabundo en los momentos mas decadentes del protagonista, y resultando luminoso y preciosista en los momentos de esperanza. Y no me refiero al aspecto visual. Es un compendio de montaje, puesta en escena y dirección de actores.

Porque cierto es que Jared Leto esta increíble, pero gran parte de culpa la tiene Vallee, ya que usa a Rayon, su personaje, para remarcar ciertos momentos y sensaciones en la película, lo cual hace que la magnifica actuación de Leto cunda mucho mas. Merece la pena verla solo por reír y llorar con las peripecias de este magnifico personaje.

Y si hablamos de actuaciones no podemos olvidar a McConaughey. Su labor esta un escalón por debajo de la de Leto y sin embargo su oscar es mas que merecido. El tío consigue a base de carisma articular un personaje arisco y antipático al que es muy fácil querer y adorar. Como hiciera Eastwood en “Gran Torino”, el bueno de Matthew construye un tejano paleto típico, racista y homologo, capaz de ostiar a su medico al decirle que tiene SIDA porque entiende que le esta llamando marica. Pero a la vez tierno, adorable y admirable, capaz de enfrentarse a sus amigos sin bacilar por defender un travesti al que tiene cariño. El es el vehículo de esta historia, el motor, que nos lleva de principio a fin. Y el resto de personajes componen los paisajes de dicho viaje.

Y si a todo ese le sumamos una banda sonora espectacular con varios temas de T rex, el conjunto se antoja irresistible. Un peliculón que provoca risas, y llantos a partes iguales, pero sobre todo miedo, impotencia e indignación por el despropósito de la situación que narra.




B.S.O:
Como no, ahí va una de T-Rex






1 comentario:

  1. Joer, iba a ir ayer a verla, pero al final tuve lío y no pude. A ver si el miércoles que viene cae.

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