lunes, 25 de noviembre de 2013

Análisi: Gravity






Puntuación: 9

Lo mejor:
Todo. La película es un complicado reloj suizo donde cada una de sus piezas encajan, y seria imposible que funcionase si alguna de ellas no estuviera.

Lo peor:
La vuelta de Clooney. Resulta un pelin forzada. Un intento de dotar a la historia de algo de heterogeneidad y de paso aprovechar un poco más a una de las estrellas de la cinta. Y que conste que es difícil escribir esto sin destripar la cinta, a pesar de que lo que ocurre se ve venir a la legua.

Sinopsis:
Mientras un equipo de astronautas americano esta instalando un equipo de pruebas en el telescopio Hubble, los rusos deciden destruir un viejo satelite. Los restos del satélite provocan una reacción en cadena que lleva a la misión espacial a ser bombardeada por basura espacial. En este marco solo sobreviven dos astronautas, Matt Kowalski, un veterano de la nasa que se encuentra en su ultima misión y la doctora Ryan Stone, astronauta primeriza, responsable científico de la misión. En el espacio, sin nave, sin comunicación con el control de misión, totalmente solos, deben esforzarse al máximo para tratar de encontrar una forma de volver a casa sanos y salvos.

Opinión:
Es imposible pensar en Alfonso Cuarón sin acordarse de sus dos amigos mexicanos, los también directores Guillermo del Toro y Alejandro González Iñarritu, ya que juntos representan la generación mas brillante del cine mexicano, y su mayor esperanza. Sin embargo es difícil encontrar tres directores mas diferentes entre si, en lo que a su obra se refiere, que estos. Si del Toro es abanderado de un cine fantástico con tonos oscuros, dirigido a los sectores mas combativos del frikismo mundial, Iñarritu opta por dedicar su obra a los rincones del alma humana a través de trípticos de historias interrelacionadas con personajes torturados por los azares del destino. Ambos, pese a ser tan distintos, encuentran su publico en una legión de ultras que los defienden a capa y espada, cada uno en su mundo.

Y en medio, como quien no quiere la cosa, encontramos a Cuaron. Un director eclipsado por sus dos compatriotas cuyo cine refleja perfectamente el termino medio de las dos corrientes antes mencionada. Y es que su cine reflexiona sobre los pesares del alma dentro de un envoltorio de película para el gran publico. Arte envuelto en espectáculo. Y es cierto que técnicamente se podría decir que su obra, salvo la tercera de Harry Potter (la mejor en mi opinión) e hijos de los hombres, no transita por los caminos del cine fantástico, pero seria difícil negar la etiqueta de ciencia ficción a una película de astronautas como Gravity, por muy pretendidamente realista que esta sea. Y si nos remontamos mas aun, sus dos primeras obras americanas, La princesita y Grandes esperanzas, un cuento para niños y otro cuento para no tan niños, destilan un lenguaje visual y ambientación dignas de cuento de hadas y cine fantástico, pese a no tocar dicha temática en su argumento.

Pero tratare de divagar sobre la obra de uno de mis directores favoritos y me centrare en esta película que hoy comento. Gravity, como he leído por ahí, es un ejercicio de forma. Es contar una historia mil veces contada, que no daría para mas de un mediometraje, sin romper en ningún momento con la realidad (en teoria) ni las reglas narrativas propuestas. Solo un escenario, el espacio (si, dentro del espacio hay varias localizaciones, pero estas siguen estando dentro del espacio), dos únicos personajes, y una narración lenta y pausada, pero efectiva y estética.

Y es que desde el minuto uno de película sabes lo que va a pasar y como va a terminar, pero eso no importa. La película no juega a eso, no quiere sorprenderte. Ni tampoco quiere que estés en tensión. Y es que a pesar de la temática, que produce cierta sensación inquietante por la suerte que pueden correr los protagonistas, la narración huye de toda sensación de agobio. Cuaron no quiere que suframos en la película como si estuviésemos viendo Un pueblo llamado Dantes peak. Solo pretende que contemplemos la odisea de unos personajes en una situación límite.

Es cierto que resulta una película tramposa en muchos sentidos. Es cierto que su pretendido rigor científico no lo es tanto y que sufre de lapsus en ese sentido según le interesa a la rama. Y que su pretendido rectismo formal no lo es tanto y se traiciona a si misma en ciertos momentos, aunque tan bien echo que ni son perceptibles. Pero no considero esto algo negativo. Nadie va al cine a que le cuenten la verdad. Para eso ya esta la vida. Al cine se va a sentir cosas, a disfrutar. Y esta película cumple con eso de sobra. En cuanto a lo que algunos dicen que la película es muy profunda porque trata de la soledad del alma o yo que se poyas, mi opinión es que son diarreas mentales. Es cierto que posee cierta trascendencia, inaudita en películas de catastrofes, pero no deja de ser una película palomitera para el gran publico, y como tal hay que tomarla. No hay que leer haya donde no hay.

En definitiva, una obra maestra digna de un gran maestro como es Alfonso Cuarón. Por cierto, el 3D es espectacular, y genialmente tratado. Jordi Costa dice que hay dos tipos de 3D, los de profundidad de campo y los de tirarte cosas a la cara. En esta película encontramos pruebas de ambos y con unos resultados geniales. No solo en los sobre saltos, que alguno hay, sino a nivel narrativo. Si vais a verla, en 3D sin duda.





B.S.O.


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